Bretonia: “Hacer una buena cerveza sin alcohol fue un gran desafío”
Bretonia Brewery, cervecería artesanal nacida en 2017, no tiene miedo a experimentar con sus estilos: su Red Smoked, una cerveza ahumada ganadora de medalla en la Copa Argentina 2022, o la Stout con Dulce de Leche son pruebas de esto. Ahora, vuelven a desafiarse con la producción artesanal de una cerveza sin alcohol. Alexis Bracco, líder del proyecto Bretonia, nos cuenta más sobre este lanzamiento.
¿Cómo surge la idea de hacer esta cerveza sin alcohol?
La idea, y el desafío, es hacer una cerveza que conserve los sabores y las características distintivas de una Amber Ale pero sin el contenido alcohólico. Costó más de lo que pensábamos, muchos meses de investigación de cómo la queríamos hacer. Tampoco hay tanta información en el mercado de cómo producirla a nivel artesanal, que es un proceso totalmente diferente a los que pueden hacer las industriales por la tecnología con la que cuentan. Esta American Amber Ale, a la cual llamamos Ámbar, es una cerveza americana que tiene notas a caramelo, un final dulzón por la malta y el lupulado que le da ese aroma característico. Fue un lindo desafío y estamos satisfechos con los resultados.
¿Cuándo será su lanzamiento?
En breve. Ya está producida, solamente estamos esperando que nos entreguen las etiquetas para lanzarlas. Siempre tratamos de que la etiqueta represente de alguna manera el contenido de la lata porque tiene que ser una primera aproximación a lo que vas a encontrar después en la cerveza. En este caso, la etiqueta hace alusión a este ámbar por el color de la cerveza, pero además, vamos a ser un poco disruptivos con el mercado ya que la imagen de fondo está generada con inteligencia artificial. También estamos en pleno lanzamiento de Al infinito y más allá que es una Hazy Ipa; una cerveza muy refrescante con un blend de tres lúpulos que le dan ese perfil tropical.
¿Cuál es la situación actual del mercado?
Es muy difícil planificar de un mes al otro, no hay costos que se puedan sostener en el tiempo. Nuestros insumos para la elaboración son importados con lo cual las fluctuaciones del dólar y las trabas en las importaciones, nos dificultan. Desde el 2018, se notó que viene decreciendo la actividad en la venta. El consumo se vio afectado, en su momento por la pandemia, y ahora por todos estos problemas económicos en el país. La situación comercial está muy complicada.
¿Hay otros factores que afecten al cervecero artesanal actualmente?
Tenemos un pie en la cabeza muy fuerte por las industriales. Aunque su producto es inferior a nuestra calidad, son los que te ponen el precio, van a los comercios y hacen contratos de exclusividad, y te ponen un precio con el cual no podés competir. También, estamos muy atrasados en el precio del litro. En lo que es el precio promedio de venta de fábrica, te diría que es un tercio de lo que tendría que valer realmente y eso trasladado a lo que vale una pinta en un bar, se tendría que estar pagando el triple. Eso el mercado hoy no lo resiste.
¿Qué rol juegan los consumidores en esta competencia de lo artesanal y lo industrial?
Es importante que la gente se acerque a las fábricas para interiorizarse en los procesos y todo lo que le ponemos para poder hacer una cerveza rica, saludable y de buena calidad, defendiendo la calidad por sobre todas las cosas. Cada vez que podemos, abrimos las puertas de Bretonia al público para que tomen contacto con el mundo de lo artesanal y vean que éstas son pequeñas empresas donde no hay grandes estructuras y que todos los que estamos acá sentimos pasión por lo que hacemos.