Chachingo: “Mendoza está desarrollando su polo de cerveza artesanal”

Chachingo Craft Beer es una fábrica de cerveza artesanal grande que se fue transformando a lo largo de los años. Sigue manejada por un grupo de amigos, comandada por Alejandro Vigil ­—reconocido enólogo—. “Ambos venimos de la industria del vino, ambos somos enólogos y agrónomos, toda la vida nos dedicamos a la producción de vino que es lo típico en Mendoza, pero siempre estuvo la idea de crear una cerveza, que generalmente la cerveza en Mendoza, en época de vendimia (la cosecha de la uva), es una bebida muy necesaria. Por lo tanto, empezamos con muy poco y ahora estamos haciendo alrededor de 30 mil litros mensuales en época alta”, cuenta Oscar Laguna, cervecero de Chachingo.

La cervecería mendocina, que recientemente obtuvo una medalla de bronce en la categoría B de la Copa Arte Cervecero 2021 por su etiqueta Amber, surgió como muchas, a partir de pequeñas cocciones. Empezó con un equipo de 300 litros y ahora sus batchs son de 2.000 litros. “Somos cinco personas que estamos en la fábrica y Alejandro que siempre nos da una mano, él tiene un paladar muy exquisito para poder determinar momentos y decisiones. Con esto quiero decir que cuando empezamos a elaborar nuestras cervezas, como veníamos de la producción del vino, me preguntaba particularmente como sacarme el chip del vino y ponerme el chip cervecero. Me costaba mucho no involucrar conceptos o fundamentos relacionados con la elaboración del vino para poder entender el proceso cervecero, por lo que, hablando con Ale, me dice que no saquemos los fundamentos del vino, sino que hay que adaptarlos a la elaboración de cerveza y eso es lo que hacemos ahora con nuestra cerveza. Hay muchas prácticas y procesos que seguimos manteniendo del vino. Así es como nuestra cerveza tiene un diferencial con respecto a otras. Primero en el uso de insumos, nosotros usamos muchos insumos que se usan en bodega, por ejemplo: levadura, barricas. Usamos muchas barricas porque disponemos de ellas, en Mendoza es muy fácil de conseguir”, explica Laguna.

Acerca del futuro de la cerveza en el país, el cervecero cree que “siempre estuvo, hoy está y siempre va a estar. Particularmente Mendoza es una isla con respecto al consumo de cerveza artesanal, todavía cuesta que el consumidor entienda y acepte un estilo que no conoce, ni nombres que no conoce. Falta que entienda que es una irish, una stout. Hay mucha gente que vos ves en el bar que piden o una cerveza que no sea muy fuerte, o una cerveza negra o una roja. Quizás en Buenos Aires ya hay una cultura más desarrollada, donde los consumidores piden por el nombre, por el amargor. Ya en las pizarras están fijadas no solo el porcentaje de alcohol, si no el color también. Hay un desarrollo diferente en las diferentes partes del país. En Mendoza ya hay un polo que se está desarrollando, gracias a muchas personas que se dedican a motivar y dar a conocer la cultura de la cerveza. Esto lo ves en las páginas web, en las redes sociales que tratan de llevar la educación cervecera: que estilos hay, que se puede encontrar en una cerveza, cómo se sirven, que copa hay que usar. Existe mucho esta educación pero con lo que es el vino, con la cerveza recién está empezando, por eso hay que ponerle mucho énfasis a esto, para poder promover esta industria que hoy en día está muy golpeada”.

Los planes a futuro de Chachingo es alcanzar una producción de 300.000 litros mensuales para cubrir varias regiones del país. Ya se encuentra en Buenos Aires y en varios lugares del país, en latas, botellas y barriles.