Cinco claves para tener el mini bar ideal en tu casa
Un mini bar es mucho más que un simple rincón de bebidas; será el punto de encuentro para los buenos momentos y nuevos rituales. Por ello, a la hora crear este lugar, además del mobiliario y el tamaño de la barra, también hay que pensar en la iluminación y el resto de los detalles decorativos. Todo de acuerdo a tu estilo y a tus gustos, pero ¿por dónde empezar?
Si disfrutás tomarte unos tragos y tener siempre a mano las mejores opciones, ahora con Craft Society podés tener un bar en tu propio living.
Lo primero es lo primero
Seguramente, cuando hablamos de tener nuestro propio mini bar, la primera pregunta que surge es cuántas bebidas necesitamos para que pueda decirse que lo estamos armando bien. Vamos a empezar por lo que les gusta a todos: cerveza. No solamente es una bebida ligera y fácil de tomar, sino que también propone una variedad casi infinita que nos invita a descubrir estilos de todo el mundo. Podés hacer un mix que asegure grandes clásicos y también otros ejemplares menos conocidos para degustar: un set de birras europeas es una apuesta segura.
¿Qué hacer con los vinos?
La selección de vinos, y más en un país como Argentina, es súper personal. Sin embargo tener nuestra propia bodega en casa es más fácil y sencillo de lo que parece. No hace falta tener muchas etiquetas, pero es importante asegurarnos que éstas tengan las mejores condiciones posibles para su conservación. Es fundamental que donde guardemos los vinos no haya cambios bruscos de temperatura ni humedad, que no estén cerca de fuentes intensas de olor, como depósitos de combustible, pinturas, etcétera, porque estas influirían en el corcho del vino y seguramente se llegaría a estropear.
Opciones de espirituosas
A la hora de pensar en las bebidas blancas, lo más práctico es elegir las que puedan ser una buena base para mezclar con frutas y lograr cocktails. La pregunta es qué tragos preferís, y así obtenés la respuesta sobre qué espirituosas necesitás. Con vodka vas a poder preparar desde un cosmopolitan a un bloody Mary.
Por su parte, con el tequila se pueden preparar las mejores margaritas, aunque si es bueno hay que disfrutarlo en chupitos. Con el ron llegan los populares daiquiris y clásicos como un mai tai. El whisky puede ofrecer desde un manhattan hasta la opción más sencilla de beberlo on the rocks.
Para tu carta de coctelería, tené en cuenta que muchas veces vas a necesitar soda y agua tónica para mezclar (por ejemplo, para hacer un gin tonic), así como limas y aceitunas para terminar los tragos.
Accesorios
Aquí vamos a hablar de cosas que se conocen como “complementos” pero que en realidad son esenciales para crear una experiencia placentera. La hielera, una eminencia. Los vasos también son importantes. Copas especiales, sobre todo para las cervezas, para poder disfrutarlas en sus vasos originales. Nada como una Spaten en su chopp, una Beck’s en su pilsner o una Franziskaner es un típico vaso weissbier.
¿En qué lugar de la casa estará tu mini bar?
Al ser un espacio de esparcimiento, siempre debe ser cómodo, no importa el tamaño que tenga. ¿Va a estar al aire libre o en el interior de la casa?, ¿vas a poner banquetas altas?, ¿de qué material será la barra? Mientras que algunos prefieren un bar móvil, tener un bar con barra y estantería es la mejor manera de disfrutar, almacenar y organizar tu surtido. No te olvides de destinar un lugar para acomodar las botellas, también para ubicar todos los instrumentos de servido: vasos, utensilios, posavasos, destapador. El espacio de guardado será tan grande como tu pasión por la cultura del buen tomar.