Crafter: “Hacer cervezas disruptivas nos mantiene despiertos y divertidos”

Desde la ciudad de Cipolletti, la cervecería Crafter hace más de diez años que elabora cervezas “radicales” destacándose en el mercado y apuntan a “brindar experiencias”. Osvaldo Buggiano, mejor conocido como “Bugui”, es uno de los socios fundadores junto a Alex Tiemroth, y en una entrevista con Pulso Cervecero nos cuenta sobre el nuevo desafío en el que se están embarcando y las dificultades que atraviesan los cerveceros. 

¿Cómo comenzó Crafter?

La idea surgió en un viaje con amigos. En 2009, arrancamos a hacer cerveza en mi departamento en Buenos Aires, después volvimos al interior y nos instalamos en un galpón de mi socio. La primera producción que hicimos fue de 1.000 litros y, por suerte, antes de tenerla lista, ya la teníamos vendida. Nuestra estrategia al principio fue buscar bares en ciudades cercanas, no más de 500 kilómetros de distancia, y fue tal el boom en ese momento que empezamos a vender en Buenos Aires, Rosario, Córdoba y en otros lugares en formas más simultáneas.

¿Y ahora van a aumentar su producción al mudarse a una nueva fábrica?

Exacto. Estamos haciendo una planta nueva en Parque Industrial que nueva de mil metros con playas con estilo con oficinas y un equipo un equipo nuevo de para hacer cerveza y tanques de 6.500 litros, es un equipo prácticamente casi siete veces más grande que el actual. Obviamente, eso fue comprado y encarado en otro momento; nos embarcamos en este proyecto antes de la pandemia. Lamentablemente, las expectativas eran otras, pero decidimos hacerlo igual porque es nuestra forma de vida, es lo que nos gusta hacer. Estamos haciendo todo a medida porque queremos armar como nuestro mini oasis en el Parque Industrial.  

¿Cómo pasaron la temporada de invierno y cómo se preparan para el verano?

Es interesante esta pregunta, porque con los años los cerveceros nos empezamos a convertir en algo muy de estación; vendemos todo y no damos a basto en verano y después llega junio, el mes más terrible. Sin embargo, en temporada baja es donde los cerveceros nos ponemos a investigar y a jugar con estilos nuevos. A nadie se le ocurriría ponerse a hacer birras experimentales en enero. En verano se hace lo que sabes que sale. Entonces, el lado positivo de la temporada baja es tener tiempo para ver dónde estás parado y qué cosas nuevas podés hacer, tenés tiempo para jugar un poco e inventar estilos, es lo que hacemos nosotros. Cuando llega diciembre nos concentramos en hacer nuestras birras de cabecera: APA, Foxy Lady, que es una cerveza con arándanos, y nuestra Red, que es una cerveza cobriza con avellanas. 

En el mercado se los distingue por innovar en los estilos y hacer cervezas experimentales…

Así nos paramos de entrada. En su momento, el mercado también lo permitía, eso fue lo lindo. En Argentina, el mercado siempre permitió hacer rarezas y experimentar. Entonces, de entrada nos propusimos hacer estilos bien radicales y experimentales. No hace mucho hicimos una trilogía de IPA con diferentes terpenos de cannabis. Usamos Lemon Skunk, O.G Kush y Hippie Crippler. Nos encantaría hacer mucho más de estas cervezas distintas, pero no son tan fáciles de vender, ahí aparecen impedimentos. 

¿Cuáles son las dificultades que aparecen a la hora de arriesgarse con nuevos estilos en la actualidad?

Creo que el principal desafío que tiene el cervecero es preguntarse hasta dónde jugar y hasta dónde sobrevivir comercialmente. Tampoco podés arriesgarte tanto, y más con la situación económica del país, tenes que ir a lo seguro. Pero a su vez, hacer estas cervezas es lo que a todos los cerveceros nos mantiene divertidos y despiertos. Hace muy poco hicimos una Hazy Ipa con el caramelo Flynn Paff, que tiene un dejo nostálgico para nosotros porque era nuestra golosina de la infancia. 

Teniendo en cuenta la situación económica de Argentina y la caída del rubro cervecero de este año, ¿ves posible que se recuperen niveles de consumo anteriores a la pandemia?

Esperamos que mejore la situación. Me parece que es un país que tiene y que le sobra para dar. Muchas cervecerías realmente han colocado a Argentina en el podio internacional; varias sacaron un premio en la World Beer Cup, siendo algo impensado entonces. Eso demuestra que, a pesar de todas las adversidades, se están haciendo las cosas muy bien en el rubro cervecero, y hay voluntad y pasión para seguir.

Previous post Banco Social de Latas anuncia con éxito sus primeros pesajes
Next post Funky Barrel «Mendoza ofrece todas las condiciones para crear cervezas Lambic»